jueves, 2 de julio de 2009


...no quedaba mucho tiempo decidió ir despidiéndose poco a poco de todo aquello que lo merecía se despidió de los trenes y los aviones, de los viajes se despidió todas aquellas ciudades en las que nunca había estado de aquellas de las que se marchó con la promesa de volver, con mas tiempo se despidió las personas a las que no había conocido y ya nunca llegaría a conocer volvió a ver algunas películas y escuchó discos sin parar despidiéndose de todas esas notas musicales encadenadas que a su vez le traían recuerdos encadenados se despidió del mar, hacia demasiado frío para bañarse, así que lo hizo de lejos se despidió de lo que estudió y de lo que le hubiese gustado estudiar de sus libros, de todos sus libros de los carros del supermercado, de las bodas de los primos de las uvas de fin de año y del dibujo que hizo cuando era niña del que seria su traje de novia se despidió del amor, ya no habría tiempo para dar con él, también lo hizo de lejos... se despidió de su tristeza para poder despedirse de todos aquellos a los que quería con una sonrisa...

1 comentario:

  1. Al empezar a leer, en un primer momento, tus palabras me parecieron tristes; pero al acabar, la sensación que me dejaron fue de vacío. Un tremendo vacío que queda al despedirse de todo, lo material, lo inmaterial, incluso los sentimientos.

    En el fondo, quizás solo sea libertad.


    Por cierto, a mi tb me encanta Nacho Vegas, y me gusta coincidir con alguien que te guste por aquí.

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